Se sabe que no todas las personas son fanáticas del turismo rural, ya que prefieren estar en un hotel 5 estrellas a pie de playa. Pero existen destinos que sin importar el ideal de viaje de cada persona, terminan tomando la curiosidad de los viajeros, y se convierten un destino deseado por estos. Un destino perfecto para este tipo de turistas es Arcos de la Frontera, en la provincia de Cádiz.
Hermosos pueblos blancos
Para nadie es un secreto lo hermoso que se ve un pueblo completamente pintado de blanco. El único contraste son los tejados color naranja, y la vegetación urbana que acompaña el paisaje. Pocos son los lugares en el mundo donde se siente la tranquilidad al llegar a estos pueblos, y Arcos de la Frontera no es la excepción.
Es el primero de los 19 pueblos que se visitan a lo largo de una ruta que atraviesa Andalucía, que sirve para ver estos hermosos pueblos de perfecto color. Es un destino que, de visitarlo de manera aislada, llenará todas las expectativas que se tengan de este.
Su paisaje interno es característico de los pueblos blancos. Las calles estrechas que fueron dejadas por los musulmanes, sobre las que se ciernen las hermosas casas prístinas adornadas con coloridas plantas en sus balcones, más las distintivas ventanas robustas, bien sean en color madera o negras. Verlo es simplemente maravilloso.
Historia de Arcos de la Frontera
Inicialmente fue un asentamiento romano llamado Arx-Arcis originalmente, el cual fue tomado por los musulmanes. Estos moldearon las calles que permanecen hasta hoy en día, y le otorgaron su característico aspecto, pasó a convertirse de manera sorpresiva en un pequeño reino.
Todo esto ha moldeado la ciudad que se conoce actualmente. De hecho, las murallas fueron erigidas durante el reinado que se instaló en la ciudad, por lo que cada civilización que ha pasado por ella dejó su marca, y le otorgó el privilegio de convertirse un verdadero punto histórico, digno de muchas visitas.
Lugares para visitar en Arcos de la Frontera
Estos en realidad son muchos, sobre todo porque en la etapa medieval de la ciudad se llegaron a erigir diversos monumentos. Algunos perduran hasta la actualidad, manteniéndose imponentes y recordando un glorioso pasado. Uno de estos lugares es la Plaza del Cabildo, donde se puede también apreciar su basílica.
Es imprescindible visitar la Iglesia Parroquial de Santa María de la Asunción, con su imponente fachada, que se planta como una pieza de arte arquitectónico muy bien diseñada. Se puede entrar no solo a las congregaciones religiosas, sino a tomar diversas fotos. Así como también la parte externa ofrece postales increíbles.
Además, el Palacio del Conde del Águila, si bien no cuenta con el gran impacto visual de Santa María de la Asunción, es una excelente pieza representativa del periodo mudéjar, que dejará a cualquier visitante completamente fascinado. A estos lugares se les suman otros increíbles monumentos, como:
1. Convento de las Mercedarias Descalzas
Con fachada imponente de estilo imperial, es un monumento religioso que vale la pena visitar, independientemente de la religión que se practique. Su belleza cautiva desde el primer momento en que se observa.
Aquí se fabrican pastas de manera artesanal, conservando no sólo el proceso productivo, sino también el buen sabor. Cada persona que ha visitado el lugar, ha quedado con ganas de regresar, solo para poder degustar de sus deliciosos productos.
2. Parador Nacional
Uno de los miradores más hermosos que se puedan visitar. Se nota mucho la influencia musulmán, gracias a los colores que ostenta tanto en su interior como en el exterior, así como en los mosaicos de decoración que adornas el suelo del mismo. Sumado a esto, es un lugar repleto de lujos, en el cual se puede tomar una deliciosa comida.
Considerado como un lugar increíblemente romántico, es muy difícil replicar el ambiente que se obtiene en este pequeño lugar del mundo, donde las preocupaciones parecieran desaparecer.
3. Castillo de Arcos de la Frontera
Siendo de arquitectura un tanto extraña con su gran torre central en la parte frontal, es uno de los puntos de mayor interés dentro de la ciudad, no solo por su aspecto, sino también por la amplia cantidad de leyendas que rondan alrededor de él. Las que dicen como este fue tomado por los cristianos, así como una que relata amores prohibidos.
Junto a estas fantásticas historias, se tiene el desarrollo del mismo, como empezó su función militar como un simple alcázar en el siglo 16, y luego pasó a convertirse en la imponente obra de arquitectura que se ve hoy en día, la cual sirvió como bastión fortificado, siendo el epicentro de diversas conquistas por parte de dos bandos durante muchos años.
De hermosa fachada igual de blanca que las casas de la ciudad, este castillo de gran tamaño, es una verdadera obra maestra. Su hermoso despliegue de arquitectura se remonta tan atrás como al siglo 11. Este fue declarado como Bien de Interés Cultural en el año 1993, y en realidad es muy fácil ver el porqué del nombramiento.
