Orbaneja del Castillo es un pueblo que solo cuenta con un total de 50 habitantes, y representa a la perfección la vida antigua. Es difícil no imaginar cómo debió ser la dinámica del lugar hace cientos de años, cuando la vida era más simple. Este es considerado como el pueblo más bonito de todo Burgos, y al visitarlo, es fácil ver el porqué.
Qué ver y hacer en Orbaneja del Castillo
Si se buscan lugares lujosos, este no es el sitio indicado, pero si se desea observar la hermosura de la naturaleza, un pueblo medieval que fue creado dentro de los cañones del Río Ebro, y en el que la máxima atracción es el agua y los paisajes hermosos, entonces este es el viaje correcto.
1. La Cascada
Algo que no todo pueblo puede presumir. Orbaneja del Castillo cuenta con una hermosa cascada de agua clara, que pasa rápidamente por el centro del poblado. Ofreciendo esta un paisaje idílico, cuenta con hermosas terrazas de piedra naturales. Estas han sido formadas durante los años por la acción del agua.
Lo más increíble es que es el primer espectáculo que se puede apreciar al descender del coche. Esto se debe a que el estacionamiento está situado exactamente al lado de esta. Por cierto, es necesario dejar el coche aparcado, ya que las calles del pueblo no son aptas para contener el flujo vehicular, ya que estas son medievales.
3. Recorrer el pueblo
Simplemente hermoso, no quedan en el mundo muchos pueblos medievales como este, que se encuentren en tan buen estado. Tanto sus calles como sus casas ofrecen un paseo perfecto, para poder disfrutar de una caminata romántica. Caminar por debajo de los balcones en las estrechas calles, genera un cierto aire de complicidad.
4. Las pozas de Orbaneja del Castillo
Estas están ubicadas inmediatamente después de la cascada. Se formaron por la misma acción del agua, la cual formo diversas piscinas que albergan aguas de color azul celeste. Son un espectáculo para los ojos, y solo eso, ya que no se puede entrar a la corriente de agua.
Esa prohibición tiene ya cierto tiempo, y es para evitar la contaminación del lugar, a causa de la acción del ser humano. Lo mejor que se puede hacer es recorrerlas y encontrar la foto perfecta desde la orilla.
5. Cueva del agua
Visible desde la plaza central de Orbaneja del Castillo, es el punto donde inicia el brote de agua que crea la cascada, cuya agua desciende por el afluente, dividiendo el poblado hasta llegar al Río Ebro. Cerca de esta también se puede encontrar la Cueva del Azar, en la cual se puede observar arte rupestre.
6. Hacer senderismo
Siendo un encantador pueblo de montaña, el cual está integrado dentro de un paisaje magnífico, las rutas de senderismo no se hacen de extrañar. En realidad, son de las mejores cosas para hacer en el pueblo, ya que, dependiendo de la que se seleccione, se puede tener una vista u otra del pueblo en sí, así como de sus atributos naturales.
Especialmente, el GR 99, el cual es el camino natural del rio Ebro, resulta ser de los mejores paseos que se pueden hacer. Solo hace falta cruzar el puente, y comenzar a caminar por la orilla del rio, hasta donde apetezca, o donde permita el terreno. Este puede ser un camino muy largo, por lo que se recomienda que sea realizado desde tempranas horas del día.
Dónde comer y alojarse en Orbaneja del Castillo
En realidad se tiene una buena cantidad de restaurantes dentro del pueblo, ya que están acostumbrados a recibir visitantes. Además, si se está fuera de Orbaneja del Castillo, en los pueblos cercanos que le rodean también es posible tener una excelente comida, por un precio muy bajo. Se recomienda en especial la Taberna Terraza El Risco.
Además, se pueden encontrar varias opciones de restaurantes para poder pasar una noche de manera cómoda, y si bien los lujos no estarán presentes como en un gran Resort, si se tendrán varias comodidades, que harán de ese descanso un momento verdaderamente especial, sobre todo si se decide pernoctar en el Hotel Rural La Puebla
Mejor momento para ir a Orbaneja del Castillo
Ya que se ha convertido en un destino turístico obligado del Norte de España, cada vez se acercan más visitantes al pueblo, por lo que puede estar muy concurrido. En realidad, lo mejor es visitarlo durante el verano, pero no en fin de semana, ya que al estar muy cerca de las ciudades, los fines de semana tienen mucha afluencia.
Lo que se puede hacer es planificar la ida en un día de semana, lo que se hace un poco complicado, pero teniendo en consideración que el viaje es corto, y el destino merece la pena el esfuerzo, resultará un pequeño escape del ajetreo de media semana. Además, si se visita en temporada alta, es más probable que se encuentre gran concurrencia.